XXVIII Festival de Tambores de San Basilio de Palenque

En esta edición del Festival, los visitantes nacionales y extranjeros disfrutaron de una fiesta de cuatro días que contó con muestras artísticas, actividades académicas y de formación como la Fiesta de la Lengua, talleres de percusión, muestras de peinados afro, ponencias, proyecciones audiovisuales; y con la tradicional gastronomía de la zona.

En cada Festival es homenajeado uno de los músicos más importantes representativos para el pueblo palenquero, y este año el turno fue para Rafael Cassiani Cassiani, la voz principal del Sexteto Tabalá, una de las expresiones musicales más representativas de las comunidades negras en Colombia, quienes interpretan desde los años treinta una mezcla de son cubano con ritmos autóctonos de la región Caribe como el Bullerengue, “Baile Cantao” y rituales fúnebres.

Cassiani, con su personalidad tranquila, es una institución cultural en Palenque, pues desde pequeño incursionó en la música participando en los ensayos de las dos primeras generaciones del Sexteto, demostrando sus conocimientos en la composición e interpretación de instrumentos como las maracas y la clave. Las letras de las canciones vienen de la tradición oral palenquera, y Cassiani emplea su experiencia para los arreglos musicales junto a los integrantes de la agrupación.

“Me llaman el parrandero porque amanezco en la calle, (bis) amanezca o no amanezca eso no le importa a nadie (bis)”. Esta es una estrofa de la canción “El Parrandero” del nuevo álbum del sexteto “Con un sólo pie”, interpretada por el Maestro Cassiani en el cierre del Festival en el que también estrenaron otras canciones, que fueron disfrutadas al máximo por el pueblo y los visitantes de todas las edades quienes se tomaron la tarima y no pararon de bailar hasta que bajaron el tablado.

Rafael Cassiani Cassiani, seguirá cantando hasta que su voz físicamente se apague y por eso es consciente, junto a los demás del Sexteto, de la importancia de la formación de semilleros para que el legado musical no se pierda y continué llevando alegría a todos los rincones no sólo del Caribe; sino del mundo, pues cada turista que llega a Palenque se lleva el sabor a ñeque ( destilado de caña tradicional) y ron que les recuerda un pedacito de la alegría de la gente que tiene en su sangre esa mezcla entre Colombia y África.